Restaurante Villahelmy (Alicante 03002)

He tardado en escribir esta entrada la friolera de cuatro meses, lo cual demuestra que que esta comida no fue nada del otro mundo (sólo en el aspecto gastronómico por supuesto).
Le tocaba a Belén elegir sitio y reservó en Villahelmy, un pequeño local en el casco histórico de Alicante que, aunque muy acogedor y original, no nos acabó de convencer, aunque es verdad que parte de la culpa fue nuestra: en vez de leer la carta detenidamente y elegir lo que más nos llamara la atención, nos pusimos a charrar como locas (y a escribir como en el caso de Isa y su afonía), de forma que cuando vinieron a tomarnos nota nos lanzamos al menú del día sin pensarlo demasiado. Un menú correcto, y poco más. Para muestra un botón: 

"La crema con  albahaca muy rica...los huevos rotos con sepia...bien. Postre...tartas congeladas. El vino y el ambiente....espectacular" Bea

"Lugar decoración muy Almodovar!!! Genial! La patata con foie estaba bien, la crema muy rica" Belén

"La cerveza, guay....Y según la cuenta...gratis?" Nerea

"Comer en pleno centro de Alicante, en un entorno agradable y divertido a un precio razonable. Carta de vinos bien escogida y a buen precio. Comida aceptable; propuestas originales  aunque el resultado se podía mejorar. La patata con crema de foie regular; fría y la crema solidificada. Las tiras de solomillo con compota? O guarnición? de fruta estaba bueno. El postre solo salvo el arroz con leche que parecía casero y estaba muy bueno para mi gusto. Yo repetiría probando otras cosas" Isa

"Opino en la línea de Isa. Añadiendo que el arroz no se recomienda. Habría que ver las tostas pero la comida no está  conseguida. Postres no caseros, quizás el arroz sí, que es el único que salvaría. El sitio y el entorno muy muy bien. El servicio fue lento pero muy agradable y estábamos la mar de a gusto." Toro

"A comer fabes, a Asturies! " Di 

No sé por qué Sonia no comentó nada, pero a tiempo está (si es que se acuerda de lo que comió). 

La verdad es que nos reímos muchísimo, como siempre, y conseguimos reunirnos todas que no es nada fácil. 

La próxima en elegir...Isa! 

Tasca Rabet de Gat (Bocairent 46880)

Aprovechando que Mónica y Sergi nos visitaban desde Barcelona, quisimos enseñarles el precioso pueblo de Bocairent y descubir algún rinconcito entrañable para comer. Y lo conseguimos. Absolutamente.

Encima de la plaza del pueblo, aunque accediendo por la calle de la Iglesia, se encuentra la tasca Rabet de Gat, con unas vistas geniales y un ambiente cuidado, tranquilo y cálido.

Poder leer la carta con una cervecita artesana en la mano ya me conquistó, pero cada plato que sacaban, la musiquita que sonaba y lo maja que era la camarera terminó de convencerme. Cuando nos sacaron la cuenta, pensé que merecía que lo compartiera.

El menú:

- 4 cervezas artesanas

- 5 cañas

- Ensalada César (con el pollo krusty, mola)

- Patatas Rabet (estilo huevos rotos)

- Croquetas caseras muy ricas

- Tortitas de camarón muy logradas

- 5 mini burguer exquisitas

- 1 pericana (de bacalo, no de capellán como la suelo comer)

- 1gran bajoca farcida para compartir (o pimiento asado relleno de arroz)

- Postres: bizcocho de canela (como no he probado otro, al día siguiente ya estaba intentándolo en mi casa!), tarta de queso y (creo) una tarta de chocolate.

Y con este  copioso y rico menú no llegamos a 15 euros por persona. Muy razonable.

Os lo recomiendo!

Comida marinera en Restaurante LLinares (Alicante 03005)

Como no podía ser de otra manera, estreno nuestra ruta gatronómica con uno de mis restaurante preferidos de Alicante, el LLinares. 

Aunque creo que han perdido en autenticidad (y en espacio) con el cambio de local, la calidad del producto sigue siendo fantástica y los puntos de cocción de pescados y mariscos perfectos.

Después de una ronda de cañas para abir boca empieza el espectáulo: quisquillas fresquísimas, cañaillas con medio Mediterráneo en cada una de ellas, espectacular hueva fresca a la plancha, navajas a la plancha de un tamaño más que considerable, almejas muy delicadas, también a la plancha, fantástica ensalada alicantina de capellán, tomate y aceitunas y un atún de ijada con patatas escabechadas como perfecta guarnición (me vuelven locas esas patatas).

Todo esto regado, como no, con una cuantas (o quizá demasiadas según a quién preguntes) frescas botellas de turbio, y muchas, muchas, muchas risas.

Para el postre no se complican, nos sacan su variadito de siempre con profiteroles con chocolate, leche frita y fruta de temporada. Para mí suficiente, pero entiendo que para los amantes de esta parte de la comida se puede quedar un poco corto.

Luego unos cafés y unas mistelitas y comida redonda.

¿El precio? 29 euros por comensal.

Salimos felices y encantadas. Ahora  la pelota está en el tejado de Belén.

Ojalá que en la próxima estemos todas. 

Por ti (para ti)

Ya no estás con nosotros para seguir escribiendo tus críticas, como tanto te gustaba,  pero me he propuesto hacerlo yo por ti (para ti). 

Cada plato, cada sorbo y cada risa te las dedico a ti Jorge. 

Espero que te estén dando bien de comer allá donde estés, seguro que están alucinando con tus gintonics al perejil.  

Ya te echamos de menos.